El futuro del automóvil es incierto
El mayor fabricante de coches tiene serias dudas de que el coche eléctrico de baterías sea el único futuro del automóvil y afirma que hay una mayoría en la industria que piensa igual pero no lo dice.
El gran jefe del mayor fabricante de coches del planeta dice que el coche eléctrico de baterías no es el único futuro del automóvil. Según el Wall Street Journal, no está lejos de la verdad y hay razones de peso para argumentar que no se puede apostar todo al coche de baterías y esta repentina fiebre del coche eléctrico es un camino a ninguna parte.Fue la base del episodio dedicado a la crisis de los materiales en la miniserie documental Control Z, que documenta la preocupación de varios expertos sobre diferentes aspectos que ponen en un serio peligro no solo esta transición eléctrica planeada desde las grandes esferas políticas, sino también el futuro mismo de la industria en general, desde la electrónica de consumo a las energías renovables. El diario económico estadounidense añade que la preocupación de la industria está creciendo: “Aun así, los desafíos están aumentando, particularmente en la consecución de piezas y materias primas para las baterías, y han surgido preocupaciones en algunos segmentos del negocio del automóvil sobre la velocidad a la que los compradores harán el cambio, especialmente a medida que los precios de los vehículos eléctricos se han disparado este año”. Es imposible, dice, que esto se pueda realizar con las reservas de litio, cobalto y otros elementos necesarios para las baterías de ión de litio que mueven no solo estos coches, sino también toda nuestra electrónica sin excepción.
Compañías como Mazda, Nissan, Volvo y BMW saben que esta migración masiva del mercado de automóvil a las baterías en los plazos que se barajan desde la UE es factualmente inviable, como nos decía el profesor Andrew Barron, catedrático de energía baja en carbono y medio ambiente de la Universidad de Swansea y titular de la cátedra de química de la Fundación Charles W. Por eso, algunos miembros de esta mayoría silenciosa a la que hace referencia Toyoda, han expresado cautela, aunque casi siempre en entornos controlados que no afecten a su imagen pretendidamente ecologista, aunque la realidad que no te cuenta Elon Musk sea que el impacto de la minería del litio, el cobalto y otros elementos usados en las baterías es aún más nocivo que el petróleo a nivel medioambiental y social, con un nivel de emisiones de CO₂ que tardan toda la vida útil de un vehículo en compensarse con el actual mix de fuentes eléctricas. Zipse coincidía con Toyoda en alertar sobre esta fiebre del coche de batería: "Decir que en el Reino Unido, hacia 2030, o en el Reino Unido y en Europa, en 2035, solo habrá un único sistema de propulsión, es algo peligroso.
Toyoda también dice que la respuesta correcta a la pregunta de cómo será el futuro del automóvil aún no está clara, así que "no deberíamos limitarnos a una sola opción".